¿Por qué la auditoría interna debe ser ágil?
Richard Chambers, presidente y director ejecutivo del Instituto de Auditores Internos de Estados Unidos (IIA), mencionó recientemente: “Se está hablando mucho sobre la necesidad de que la auditoría interna sea ‘ágil’. Mi definición de agilidad es simple: ‘la capacidad de auditoría interna para girar rápidamente para abordar los riesgos emergentes y las expectativas cambiantes de las partes interesadas’. ¡Es fundamental para nuestro éxito! “
Nos toca vivir en un mundo VUCA (Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo), donde las dificultades para predecir el futuro próximo no disminuyeron con la pandemia, sino por el contrario se incrementaron.
Años atrás, en las organizaciones se hacían planes detallados a 3, 5 e inclusive a 10 años. Hoy pensar en esos tiempos es, en la mayoría de los casos, hacer ciencia ficción.
La dinámica con la que actualmente suceden los acontecimientos nos obliga a redefinir antiguos paradigmas de trabajo colocando la flexibilidad y la adaptabilidad en el centro de la escena. Las personas y las organizaciones en su conjunto y en cada una de sus áreas, deben adoptar nuevas formas de trabajo que permitan dar respuestas rápidas y sólidas a los cambiantes desafíos que se presentan.
Auditoría Interna, como tercera línea de defensa, fundamental en las organizaciones, no son la excepción. Con los enfoques tradicionales, basados en elaborar exhaustivos planes de trabajo y luego en su ejecución, difícilmente puedan dar respuestas rápidas y oportunas alineadas con lo que se les demanda actualmente: aseguramientos más eficientes, mayor anticipación a los riesgos, recomendaciones más profundas y mejor asesoramiento sobre procesos y controles, entre otras.
Los enfoques ágiles “tomaron nota” de la situación. Con su bautismo en el año 2001 de la mano del desarrollo de software, un largo recorrido se ha hecho en estos casi 20 años. Su aplicación en proyectos de diferentes industrias, tipos y tamaños como a nivel de organización y áreas dentro de la misma ya es habitual. Agilidad es fundamentalmente utilizar marcos de trabajo que nos permitan ser flexibles, es inspección y adaptación, es reconocer sin complejos que “no podemos ver demasiado lejos”.
Preguntarnos si el área de auditoría debe o no adoptar enfoques y herramientas de la agilidad para desarrollar sus actividades es como preguntarnos si queremos estar a la altura de las circunstancias o no.
Seguramente preguntas más oportunas sean cuándo y cómo hacerlo. La mentalidad ágil y la adopción y adaptación de marcos de trabajo ágiles como Design Thinking, Scrum, Kanban, OKRs (Objetivos y Resultados Clave) abren una nueva perspectiva a la función de Auditoría, para agregar valor a la organización, y como resultado de ello reposicionarse.
La Auditoria Ágil es enfocarse en las necesidades de los interesados, es acelerar los ciclos de trabajo, es generar ideas oportunas, es mejora continua, es reducir esfuerzos innecesarios y es generar menos documentación entre otras características.
Definitivamente el “viaje” a la auditoría ágil no es un camino rápido ni sencillo, resulta necesario que cada proyecto de auditoría se centre en lo que se necesita ahora, para hoy y mañana y los beneficios al final del recorrido lo justifican ampliamente:
• Lograr hacer más auditorías en menos tiempo.
• Mejorar las relaciones con las partes interesadas.
• Contar con la capacidad de completar todos los proyectos rápidamente.
• Eliminar la documentación innecesaria.
• Entregar informes más relevantes.
• Lograr que el equipo de Auditores piense, no solo en realizar el trabajo a gran velocidad, sino saber cuándo han hecho lo suficiente para informar y pueden detenerse.
• Tener la capacidad de saber cuándo se debe cambiar el plan de auditoría.
• Estar preparados para responder en forma rápida y eficaz ante los cambios son algunos de ellos.
Solo necesitamos que el Comité de Auditoría comprenda la necesidad del cambio y los beneficios de una auditoría ágil, brindando su apoyo y compromiso para el salto de calidad.
Y, por último: ¿cómo adoptar un enfoque ágil en Auditoría respetando los estándares profesionales del IIA (The Institute of Internal Auditors)? La respuesta es muy simple. Richard Chambers, presidente y director ejecutivo del Instituto de Auditores Internos de Estados Unidos (IIA), mencionó que ¡La Agilidad es fundamental para el éxito de la Auditoría Interna!
Quedan todos invitados a comenzar, o profundizar aquellos que ya se encuentren en el viaje, el camino a la Auditoria Ágil en el marco de cada organización, de su estructura y fundamentalmente de su cultura.
La capacitación y la actualización profesional es una inversión, no un gasto, y no debe relegarse a un segundo plano.